Es conocido por todas las personas que se acercan a la Geobiología el papel tan importante que juegan algunos árboles en la armonización de los lugares, es decir, en la estabilidad del equilibrio en el intercambio de las energías cósmicas (provenientes del cielo) y telúricas (las que provienen de la tierra) denominadas energías cosmotelúricas que se producen en un lugar.
Una de las grandes dificultades que nos encontramos, no solo en lugares lejanos de nuestro planeta, sino a pie de calle, en nuestras ciudades y pueblos, es la enorme deforestación que se ha ido produciendo a lo largo de los últimos años.
Desde el punto de vista que la Geobiología nos puede aportar, esto incide directamente en un desequilibrio en la estabilidad del campo magnético del lugar; por lo que este índice cosmotelúrico se desequilibra de un modo grande hacia lo telúrico.